Supertocino

Hoy me liaría a hablar pero tengo muchas cosas que hacer, así que no será muy largo. Ayer me apunté a lo de los zombies. Todo está muy bien organizado y encima la gente se lo toma en serio: ¡¡hasta se hacen espadas curradas y todo!! Yo estoy pensando en hacerme algo también, aunque sea un truño. El Lunes empieza la guerra :D

Para compensaros por la brevedad de la entrada de hoy, os dejo con un auténtico héroe, de esos que solo salen en las películas:

¡Hasta otra amijos!

Zombies vs. Humans (Belén Esteban no cuenta)

Bueno días tocinos y tocinillas. ¿Sabéis que es Humans vs. Zombies? Seguro que no, pero os aseguro que si pudiérais participaríais.

Este año en mi universidad pondrán en marcha este juego que consiste en huir de los zombies por todo el recinto universitario. Si te pillan (como es lógico) te conviertes en zombie y se suman un punto aquellos que te hayan pillado. Supongo que cuando ya no quede ningún humano darán un premio o algo para el que haya cazado más, y si se da el caso de que queda algún sobreviviente, pues dárselo a él/ella.
Hay varias variantes de este juego, como Runners vs. Zombies (más currado) en el que hay un recorrido con trampas y obstáculos, teniendo así que esquivarlos hasta llegar a la meta. Eso sí, habrá zombies que si te atrapan pues pierdes y te conviertes en uno de ellos. Iba a ir este año, pero resulta que caía el día antes de selectividad y al final me quedé estudiando (cosa de la cual no me arrepiento).

Os iré comentando las novedades sobre esto, os contaré como sobrevivo y también como me cagaré en sus muertos si me pillan los zombies.

Un saludo gorrinero de vuestro amigo y vecino Ryuzaki.

Día de vagancia extrema

Hola gente, os escribo para confesaros una cosa: hoy soy el tío más vago que hay en el planeta Tierra y en lo que no es la Tierra. La razón? Lo hizo un mago*.

Bueno, pese a la vagancia, aquí estoy escribiendoos, y os voy a explicar un poco mis aficiones. Lo que más me gusta sin lugar a dudas son los videojuegos. Nunca digo que no a una buena partida, y más si me gusta mucho el juego. También hago (o mejor dicho, hacía) parkour, que consiste en ir por ahí esquivando obstáculos de diferentes maneras. Pero debido a 2 de bachillerato tuve que dejarlo y cuando intenté retomarlo ya no me acordaba de nada. Tampoco es que fuera muy bueno la verdad, solo hacía lo básico. Y bueno, cuando es viernes y sábado, por la noche veo series. Ahora mismo estoy esperando la nueva temporada de The Walking Dead con ansias! No sabéis las ganas que tengo de verla. Y junto a ella, Game of Thrones, Breaking Bad, etc...

Y para terminar os cambiaré radicalmente de tema: ¿visteis la manifestación del 25S? Gente reinvindicando sus derechos y un cambio al unisono.  Pero como siempre, los liantes fueron incitados por la secreta y acabaron a palos con todo el mundo. Y no solo eso, también insultos, violación de derechos, abuso de poder... en fin, una vergüenza. España necesita un cambio pero ya.

Un saludo, Ryuzaki



*Véase el capítulo de los Simpsons en el que sale la supuesta Xena en la tienda de cómics.

Hay un nuevo tocino en la red

Buenos días, tarde, noches o mediodías. Mi nombre es Sergio, pero prefiero que me conozcáis por Ryuzaki. Os preguntaréis que mierda de nombre es Ryuzaki, ¿verdad? Pues la verdad es que es un personaje de manga y anime (Death Note), el cual me gusta mucho y decidí llamarme como él.

Ahora que ya sabéis un poco quién soy, os explicaré unas cuantas cosillas más para que vayáis entrando en mi blog. Para que os aclaréis, en este blog hablaré de todo un poco, de lo que se me pase por la cabeza. Puede que un día os encontréis con unas paridas y unas idas de olla impresionantes o con algo profundo y sentimental, todo depende de como esté ese día. Vale, todo esto está genial, pero... ¿por qué "Crónicas de un tocino"? Pues la verdad es que todo se debe a un conjunto de paridas entre amigos y al final pues ha marcado. Además, ¡no se me ocurría nada mejor!

Terminando ya, deciros que muchas gracias por entrar en mi blog y espero que os guste de aquí en adelante.

Un fuerte abrazo, Ryuzaki